Fast & Furious X.

Fast & Furious X (título original: “Fast X”) es una película de acción dirigida por Louis Leterrier y escrita por Justin Lin y Dan Mazeau. Es la secuela de F9, y la décima entrega principal de la franquicia Fast & Furious.

En Fast & Furious X el ex-convicto Dominic Toretto (Vin Diesel) ahora tiene la responsabilidad de proteger a su equipo y a su familia de un nuevo y peligroso villano llamado Dante Reyes, el cual resulta ser el hijo del antiguo mafioso y narcotraficante brasileño Hernán Reyes, quien ha estado planeando su venganza por la muerte de su padre durante los últimos doce años desde los acontecimientos de “Fast Five”…

Exagerado, ruidoso, absurdo y quizás demasiado largo. Y, sin embargo, Fast & Furious X no solo entretiene fácilmente al público, sino que sobre todo logra no defraudar a los fanáticos de la saga, especialmente cuando, en la parte inicial, los devuelve al estado de ánimo de “la inolvidable primera película”, con la adición de un homenaje romántico y muy adecuado a Paul Walker.

El resto es el principio del fin: un frenético rodeo de enfrentamientos y batallas sobre cuatro ruedas que “desafían las leyes de Dios y de la gravedad”, para llegar a un “non-end” repleto de cliffhangers a la espera de la verdadera conclusión de la historia (que será una tortura para los fanáticos).

Y con razón, porque Fast & Furious X es una película que manifiestamente no se centra en la novedad, sino en el vínculo creado entre espectadores y personajes a lo largo de los años, y en los magníficos actores que han hecho de la franquicia un éxito mundial, a pesar de que algunos capítulos están mejor logrados que otros y aunque ninguno de ellos haya podido igualar la magia de la película número uno.

El primer acto de la trilogía final, por tanto, no decepciona pero tampoco enamora. Nos deja -eso sí- con muchas ganas de ver cómo será la gran final. Con la esperanza de no chocar con expectativas demasiado altas.

Luisa Scarlata